¡Hola mis pequeñas avellanas! Hoy os traigo un post de estos que me gustan a mí, de los bien “cukis”. Y es que siempre que hablamos de pegatinas parece que nos cambia la cara y decimos: Oh, ¡pero qué monas por favor!
Quizás porque me recuerda a la infancia, porque hacen que sea tan fácil (¡y barato!) decorar una aburrida página en blanco o por todas las opciones que ahora mismo hay en el mercado hacen que me declare fan número uno de las pegatinas.
¿Y cómo puedes utilizarlas en tu organización habitual? ¿Cómo incluirlas en tu agenda? Y es que creo que no solo sirven para “hacerlo bonito” sino que nos pueden servir para ser más productivas e incluso estar más motivadas. Al decorar la agenda, nos paramos a planificar con mimo y además nos puede ayudar a sentirnos más creativas.
Según el uso que le queramos dar podrían ser pegatinas de frases motivadoras, símbolos pequeñitos, temáticas, más grandes para decorar, donde tengamos espacio para escribir algo o incluso hacer seguimientos, divertidas, coloridas etc. Reflexiona antes de qué manera podrías usarlas y te animo a darte un pequeño capricho de pegatinas (que dan mucha alegría y es algo baratillo ;)
Te dejo por aquí algunas ideas…